Un día más en mis largos paseos por Barrapunto, me encuentro un comentario muy interesante y por suerte o por desgracia de una persona anónima.
¿Se le puede considerar un troll?, pues según gustos (desde luego, el mensajes poco tiene que ver con el tema original...).
Vaya por delante que me gusta mucho el mundillo de linux y del software libre en general; de hecho ahora mismo escribo desde una Linex. Pero creo que todos tenemos que aceptar la aberrante realidad: muchos usuarios de Linux serían usuarios de Mac OS si no fueran unos ratas acabados. ¿Por qué digo esto? Porque por mucho que nos duela a todos, en linux no se aprecia la calidad ni la libertad.
Generalmente el software para Linux NO tiene la misma calidad que la mayoría del software privativo. Es normal, no tiene nada de malo. Al fín y al cabo, es gratis y el otro es caro... Nadie usaría MS Project si el Gnome Planner fuera igual de bueno, pero está bien tener una solución gratuita para cosas poco serias.
El otro motivo por el que un usuario se pasa a Linux puede ser el código abierto, que también es un gran motivo. Pero seamos sinceros, ¿cuántos de vosotros repasa el código de cada nueva versión de cada programa que usa, y una vez asegurado que todo está bien, lo compila y ejecuta? No obstante, alabo la grandeza de poder adaptar algun programa puntualmente para tus necesidades. Yo mismo he cambiado decenas de veces el código fuente para que en el "Acerca de..." salga mi nombre.
Y el otro motivo, y por el que metería la mano en el fuego que es el que comprende por lo menos al 50% de los usuarios de Linux, es la exclusividad. Igual que el mundo Apple es una maravilla de la usabilidad, pero al >50% de sus usuarios eso les da igual porque lo que quieren es su manzanita plateada en la tapa del portátil; a la mayoría de usuarios de Linux, las ventajas de éste les da igual y buscan la EXCLUSIVIDAD.
Más después del salto
Yo diferenciaría entre dos tipos de exclusividad: la versión rata del Maquero, que no se quiere gastar ni un duro y usa cosas como Gnome+Compiz o KDE4; y el mega-friki a lo Richard Stallman, que entre tranchete y tranchete que se saca del pie como aperitivo, ve pelis con un conversor MPEG-->ASCII, edita su página web con su emacs en modo texto, o mira algunas páginas con wget, todo sin salir de una sola instancia de la consola.
Al primer grupo de "exclusivos" no les importa que para cambiar de escritorio ahora haya que dislocarse la muñeca girando un cubo en 3D, o que con KDE4.2 se puedan hacer la mitad de cosas que con KDE3, pero en el doble de tiempo. Lo chulo es tener ventanitas que al moverse se tambalean como unas buenas teticas. Quizá eso sea lo más cercano al sexo femenino que vayan a estar muchos en su vida. Este tipo de usuarios usan Ubuntu, Debian, Mandriva... da igual. Al fín y al cabo son gente sin complejos, que de buena fe (a menudo mal influenciados por los del segundo grupo que mencionaré) huyen del mundo Windows y se van al gratuito Linux.
El otro grupo de gente busca una exclusividad más intelectual (si configurar X.org en modo texto fuera considerado intelectual por alguien con una vida sexual sana). Son los típicos que van dándote el coñazo porque usas MS Office o OpenOffice en vez de Latex, los que se creen que chanan mil por tener que meter secuencias de teclas del estilo "/busco:qqqvv!!" para editar un texto en su VI, los que ven páginas en Lynx y te tratan de hereje por usar Flash, los que creen que los entornos de ventanas son una conspiración de las multinacionales para obligarnos a comprar ordenadores más caros, y los que piensan que si usas Ubuntu, es que eres un lammer.
Todos estos, hace años, usaban distros como Corel, Mandrake... que eran relativamente fáciles de usar (mucho más que Debian o Caldera), y podían usar escritorios ligeros como IceWM, XFCE, Enlightement... Eso les bastaba para sentirse más listos e importantes que sus amigos los tontos windowseros, que usaban el ordenador para cosas tan poco nobles como jugar, editar textos enriquecidos, usar un escáner o una impresora, conectarse a internet con un módem de 56kbps...
Con la popularización de distros como Ubuntu, sus amigos y familiares por fín les hicieron caso y muchos de ellos se pasaron a Linux. En realidad, nunca creyeron que nadie les hiciera caso en la vida, y por eso no contemplaron la posibilidad de que algún día pudieran dejar de creerse "superiores" a sus congéneres por trabajar para su ordenador mientras los demás se van de cervezas, como se ha hecho toda la vida.
Este tipo de gente es la que está resentida con Ubuntu... no soportan que lo que antaño fue un mérito suficiente para poder ir por los pasillos de la uni con una gabardina negra y el pelo engominado para atrás a lo Neo, hoy en día haya degenerado a algo cada vez más usable, fácil de instalar y configurar... y ya no les tengan que venir detrás a pedirles que por favor les ayuden a configurar la Super VGA.
¿Y tú, hasta dónde te molaría llegar en el día de hoy sin usar emacs?
Gracias por su atención.
(c) este comentario está publicado bajo licencia Creative Commons
¿Será la nueva milanesa? El tiempo lo dirá...
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